¿Te apetece comer algo dulce después de la siesta?

Jun 25, 2024 0 Comments in Estilo de vida
¿Te apetece comer algo dulce después de la siesta?

 

¿Te has despertado de la siesta con unas ganas irresistibles de algo dulce? No te pasa solo a ti,  es algo muy común.

Sucede debido a varios factores, los más importantes son estos:

  • la duración de la siesta importa. La duración de tu siesta, es crucial en como te sientes al despertar. Las siestas cortas, de 10 a 20 minutos, son ideales para darte un empujón rápido de energía sin entrar en las fases profundas de sueño. Cuando duermes más de 30 minutos, puede ser que entres en un sueño profundo. Al despertarte en esta fase, puedes tener sensación de desorientación (resaca de sueño) y bajos niveles de energía, lo que lleva a tu cuerpo a buscar una fuente rápida de energía , como los dulces. Los azúcares simples elevan muy rápido los niveles de glucosa, proporcionando energía al instante.
  • Lo que comes antes de la siesta también influye. Si en la comida previa has tomado muchos carbohidratos simples, como pasta, pan o dulces, sin demasiadas proteínas, tu nivel de glucosa en sangre sube rápidamente y luego cae durante la siesta. Esta caída de azúcar en sangre puede desencadenar sensación de hambre y antojos de dulce al despertar, tu cuerpo quiere recuperar los niveles de glucosa. Una comida equilibrada en proteínas, grasas saludables y carbohidratos complejos ayuda a evitar los picos de glucosa, reduciendo la probabilidad de los antojos.
  • ¿Porqué no ocurre después de dormir ocho horas por la noche? A diferencia de la siesta, dormir ocho horas permite que tu cuerpo pase por todos los ciclos de sueño necesarios para una completa recuperación. Durante la noche el organismo regula y estabiliza los niveles hormonales, lo que ayuda a mantener un equilibrio en la glucemia. Además, el periodo prolongado de descanso nocturno permite que tu cuerpo utilice y procese la energía de forma óptima, evitando las caídas bruscas que ocurren durante la siesta diurna.

Lo ideal para evitar estos antojos es hacer siestas cortas, aunque  no hay nada de malo en comer un poquito de chocolate negro después de una siesta, disfrutándolo y saboreándolo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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